domingo, 30 de agosto de 2009

BIOELEMENTOS

Todos los seres vivos están constituidos, cualitativa y cuantitativamente por los mismos elementos químicos. De todos los elementos que se hallan en la corteza terrestre, sólo unos 25 son componentes de los seres vivos. Esto confirma la idea de que la vida se ha desarrollado sobre unos elementos concretos que poseen unas propiedades físico-químicas idóneas acordes con los procesos químicos que se desarrollan en los seres vivos.
Se denominan elementos biogenésicos o bioelementos a aquellos elementos químicos que forman parte de los seres vivos. Atendiendo a su abundancia (no importancia) se pueden agrupar en tres categorías: macroelementos, microelementos y oligoelementos.

Macroelementos o bioelementos primarios
(C, H, O, N).

Son los elementos mayoritarios de la materia viva, constituyen el 95% de la masa total. Las propiedades físicoquímicas que los hacen idóneos son las siguientes:
· Forman entre ellos enlaces covalentes, compartiendo electrones
· El carbono, nitrógeno y oxígeno, pueden compartir más de un par de electrones, formando enlaces dobles y triples, lo cual les dota de una gran versatilidad para el enlace químico
· Son los elementos más ligeros con capacidad de formar enlace covalente, por lo que dichos enlaces son muy estables.
· A causa de la configuración tetraédrica de los enlaces del carbono, los diferentes tipos de moléculas orgánicas tienen estructuras tridimensionales diferentes. Esta conformación espacial es responsable de la actividad biológica.
· Las combinaciones del carbono con otros elementos, como el oxígeno, el hidrógeno, el nitrógeno, etc., permiten la aparición de muchos grupos funcionales que dan lugar a las diferentes familias de sustancias orgánicas. Estos presentan características físicas y químicas distintas, y dan a las moléculas orgánicas propiedades específicas, lo que aumenta las posibilidades de crear nuevas moléculas orgánicas por reacción entre los diferentes grupos.
· Los enlaces entre los átomos de carbono pueden ser simples (C - C), dobles (C = C) o triples.

Microelementos o bioelementos secundarios
Los encontramos formando parte de todos los seres vivos, y en una proporción del 4.5%.

Azufre: Se encuentra en dos aminoácidos (cisteína y metionina), presentes en todas las proteínas. También en sustancias como la coenzima A

Fósforo: Forma parte de los nucleótidos de los ácidos nucleicos, de coenzimas y fosfolípidos (esenciales de las membranas celulares). Forma parte de los fosfatos, sales minerales abundantes en los seres vivos.

Magnesio: Forma parte de la clorofila, y en forma iónica actúa como catalizador, junto con las enzimas, en muchas reacciones químicas del organismo.

Calcio: Forma el carbonato de calcio de los huesos. En forma iónica interviene en la contracción muscular, coagulación sanguínea y transmisión del impulso nervioso.

Sodio: Catión abundante en el medio extracelular; necesario para la conducción nerviosa y la contracción muscular.

Potasio: Catión más abundante en el interior de las células; necesario para la conducción nerviosa y la contracción muscular.

Cloro: Anión más frecuente; necesario para mantener el balance de agua en la sangre y fluido intersticial.

Hierro: Esencial para la síntesis de clorofila, catalizador en reacciones químicas y forma parte de los citocromos de la respiración celular, y en la hemoglobina para el transporte de oxígeno.

Manganeso: Interviene en la fotolisis del agua, durante el proceso de fotosíntesis en las plantas.

Yodo, Iodo: Necesario para la síntesis de la tiroxina, hormona que interviene en el metabolismo.

Flúor: Forma el esmalte dentario y de los huesos.

Cobalto: Forma parte de la vitamina B12, necesaria para la síntesis de hemoglobina.

Silicio: Proporciona resistencia al tejido conjuntivo, endurece tejidos vegetales como en las gramíneas.

Cromo: Interviene junto a la insulina en la regulación de glucosa en sangre.

Zinc: Actúa como catalizador en muchas reacciones del organismo.

Litio: Actúa sobre los neurotransmisores y la permeabilidad celular. En dosis adecuada puede prevenir estados depresivos.

Molibdeno: Forma parte de las enzimas vegetales que actúan en la reducción de los nitratos por parte de las plantas.

Níquel: Importante para el buen funcionamiento del páncreas..

Cobre: Interviene en la fotosíntesis, contribuye a la formación de glóbulos rojos y al mantenimiento de vasos sanguíneos, nervios, sistema inmunológico y huesos.

Boro: En las plantas es esencial para el mantenimiento de la estructura de la pared celular y de las membranas.

Vanadio: Regulación del metabolismo de los lípidos.

Estaño: Importante para el crecimiento capilar, mejora el funcionamiento del sistema inmunológico y de los reflejos.

Selenio: Es un antioxidante, estimula el sistema inmunológico e interviene en el funcionamiento de la glándula tiroides.